No abras la puerta.

Muchas personas piensan que esto que os voy a relatar es una simple leyenda, un cuento o una falsa historia. Pero yo lo único que puedo hacer es contárosla, a partir de ahí, sacad vuestras conclusiones.

Hace 14 años, estaban en su casa, tan tranquilos. María una señora de 30 años que se había divorciado recientemente, con su hijo pequeño de 8 años. Como era de costumbre, María se tenía que ir todas las noches a trabajar, debido a que era una mujer con muchas responsabilidades, tanto en su trabajo como en su casa. Pero aquel día sería muy difrente al resto de los demás; ya que, cuando se encontraban cenando vieron en las noticias que un asesino en serie, muy peligroso y agresivo había escapado del centro penitenciario de la ciudad. Lo más grave de la noticia no era que este interno hubiera escapado, lo peor era que había sido visto pocas manzanas cerca del hogar de la familia. Esto provocó la incertidumbre de María que al irse al trabajo tenía que dejar a su hijo solo en casa.

María para prevenir desgracias cerró las ventanas, puertas y le explicó a su hijo lo siguiente: -No abras ninguna ventana ni las puertas. Aunque llevo las llaves, por si ocurre algo, yo llamaré 3 veces seguidas al timbre o simplemente me reconoceras por la voz y encontes sabrás que soy yo.-

Llegado el momento, María se fue a trabajar y dejó a su hijo solo. Éste, lleno de miedo, cerró la puerta a cal y canto y se puso a ver la tele para relajar la mente. Al cabo de un rato, el chico ya estaba dormido cuando de pronto llaman a la puerta. PON... PON... el chico se despertó y aterrado se dirigió muy despacio hacia la puerta y dijo: -¿Eres tú mamá?- La respuesta vino con otra serie de golpes acompañados de un susurro escalofriante que decía: -Abreme la puerta...- El niño atemorizado huyó hacia su habitación donde se pasó la noche llorando y esperando a que llegase su madre, hasta tal punto que se quedó dormido.

Al día siguiente cuando se levantó se dio cuenta de que su madre no había vuelto. Y aun con miedo se dirigió hacia la puerta que conducía a la salida de la casa y se encontró a su madre con las piernas cortadas por lo que no pudo llegar al timbre, la lengua cortada por lo que no le pudo reconocer la voz y totalmente ensangrentada. Desde ese día este chico tuvo que estar hospitalizado en un psiquiátrico y no pudo dormir sin sufrir constantes pesadillas...

Y si os preguntáis porqué sé... es porque, simplemente, soy ese niño.
La gente dice que nuestra vida es una mierda, que hay oscuridad...

Pero, ¿sabes qué? No es así.

¿Quién soy yo? Solo soy un rayo de luz en la oscuridad, pero incluso yo tengo miedo de quedar atrapado en la oscuridad.

...

Mi corazón está abierto, lo tengo que cerrar... me importas tanto.... esa es mi debilidad. Mis cicatrices me recuerdan que el pasado es real... Mi corazón está abierto para sentir...

Estoy ebrio y me siento mal y sólo quiero estar solo, me duele porque estás aquií. ¿Por qué no te vas a casa? Porque guardas todo tu miedo y no hay nada que yo pueda hacer. Me estás volviendo loco...

Yo traté de ayudarte cuando no quería hacerlo. Te estás haciendo daño y no lo puedes ver, que te ahogas en el agua y mi mano te ofrecí, dejando el corazón abierto pero no lo entendiste. La compasión es natural, esta noche es nuestro último baile...

Tienes que cambiar... no puedo ayudarte a cambiar. Pero puedo decirte que lo intente. Lo siento pero tengo que seguir con mi vida...

Oscuridad

Luna... eres la única que ilumina mi camino de soledad en esta noche...

Llevo caminando por la oscuridad sin rumbo en busca de respuestas que quizás no logre encontrar, tan solo la soledad y mi espada son las únicas que me acompañan en este largo camino...

¿Será hora de rendirse y darlo todo por perdido? no lo creo, aun queda camino que recorrer... tendré que enfrentarme a muchas adversidades y a gente pero... ¿podré aguantar esta carga solo? si digo que sí estaría mintiendome a mi mismo, asi que dudo mucho que pueda con este peso en mi espaldas...

Espero no sucumbir a la oscuridad que me rodea y siendo solo un recuerdo lejano en la gente.

Discurso

Aquí estoy de vuelta, tras un pequeño periodo de vacaciones... si se puede decir así.


Mientras voy preparando las cosas para los cambios del blog, empezaré con un pequeño discurso, pero no es mio, sino de un veterano de guerra de los E.E.U.U.

Traté de sentirme orgulloso de mí mismo, pero solo pude sentir vergüenza. El racismo ya no podía enmascarar la realidad de la ocupación por más tiempo, eran personas, eran seres humanos. Desde entonces me plaga la culpa, puede que vea a un hombre mayor, como el que no podía caminar y lo rodamos sobre una camilla para que la policía Iraquí se lo llevara. Siento culpabilidad cada vez que veo una madre con sus hijos como la que sollozaba histéricamente gritandonos de que éramos peores que Saddam mientras la obligábamos a salir de su casa. Siento culpabilidad cada vez que veo a una niña joven como la que agarré por el brazo y arrastré hacia la calle.

Se nos dijo que luchábamos contra terroristas, el verdadero terrorista era yo... y el verdadero terrorismo era esta ocupación. El racismo dentro de lo militar ha sido durante largo tiempo una herramienta para justificar la destrucción y ocupación de otro país. Durante mucho tiempo se ha usado para justificar matanzas, la subyugación y torturas de otras gentes. El racismo es una arma vital empleada por este gobierno, es un arma más importante que un rifle, que un tanque, que un bombardero o que un barco acorazado. Es más destructiva que el proyectil de artillería o un rompe bunker o un misil tomahawk.

Mientras que esas armas son creadas y de la propiedad de este gobierno, son inofensivas, mientras que haya personas que se nieguen a usarlas. Aquellos que nos envían a la guerra, no tienen que apretar el gatillo o tirar una ronda de morteros, no tienen que luchar en la guerra, solo tienen que vender la guerrar. Necesitan a un público dispuesto a enviar y a poner a sus soldados en peligro, necesitan a soldados dispuestos a matar y a ser matados sin cuestionarlo.

Pueden despilfarrar millones en una sola bomba, pero esa bomba solo se convierte en arma cuando los rangos militares están dispuestos a seguir ordenes para usarla. Pueden enviar al último soldado a cualquier parte del mundo pero solo habrá guerra si los soldados están dispuestos a luchar.

Y la clase dominante, los billonarios que obtienen beneficio del sufrimiento humano, solo se preocupan en expandir riqueza, en controlar la economía mundial. Comprendan que su poder solo yace en su habilidad para convencernos de que la guerra, la opresión y la explotación es por nuestro interés. Ellos entienden que su riqueza depende de su habilidad en convencer a la clase obrera a que mueran para controlar el mercado de otro país, y de convencernos a que matemos o muramos se basa en su habilidad de hacernos pensar de que alguna forma, somos superiores.

Soldados, marineros, marines, aviadores, no tienen nada que ganar con esta ocupación, la gran mayoría de gente viviendo en los E.E.U.U no tienen nada que ganar con esta ocupación, de hecho, no solo no tenemos nada que ganar que incluso sufrimos más, debido a ella perdemos miembros y damos nuestras vidas de forma traumática, nuestras familias deben contemplar los féretros abanderados siendo bajados a la tierra. Millones de personas en este país, sin asistencia médica, sin trabajo, sin acceso a la educación, debemos mirar como este Gobierno derrocha 450 millones de dólares diarios en esta ocupación.

Gente trabajadora y pobre de este país son enviados para matar a gente trabajadora y pobre de otro país para convertir a los ricos más ricos aun. Sin el racismo, los soldados se darían cuenta de que tienen más en común con el pueblo Iraquí de lo que tienen en común con los billonarios que nos envían a la guerra.

Tiré a familias enteras a la calle en Irak solo para volver a casa y encontrarme con familias siendo tiradas a la calle en este país con esta trágica e innecesaria crisis hipotecaria. Debemos despertarnos y darnos cuenta de que nuestros verdaderos enemigos no se encuentran en un país lejano y no son personas cuyos nombres desconocemos, ni culturas que no comprendemos. El enemigo son personas que conocemos muy bien, personas que podemos identificar, el enemigo es un sistema que declara la guerra cuando es rentable, el enemigo son los Jefes Ejecutivos que nos despiden de nuestros puestos de trabajo cuando es rentable, son las Compañías Aseguradoras que nos niegan la asistencia médica cuando es rentable, son los bancos que nos expropian nuestros hogares cuando es rentable, nuestro enemigo no está a 5000 millas de distancia, están justo aquí en casa. Si nos organizamos y luchamos juntos con nuestras hermanas y hermanos podremos detener esta guerra, podremos detener a este Gobierno y podremos crear un mundo mejor.


Si la tiranía y la opresión llegasen a esta tierra, será bajo el disfraz de lucha contra un enemigo extranjero. La perdida de la libertad doméstica será cargada de provisiones contra el peligro extranjero, real o imaginario...