-Buenas
tardes Javier, hacía tiempo que no lo veía por aquí.- Dice su psicólogo con una
sonrisa.
Javier
se sienta en la silla y devuelve un libro con el título “Heavy Rain”.
Ángel
lo mira preguntando. -¿Y bien…?-
El
muchacho cierra los ojos, suspira y mira al techo diciendo. –La verdad… me ha
servido bastante pero no sé…-
Se
sienta el psicólogo en su silla y con los brazos cruzados apartando la libreta
de sus notas con Javier pregunta. -¿Y qué le trae por aquí? Porque para una
visita de cortesía no creo que hayas venido. No es que la rechace pero sería
bastante rara la verdad.-
-Suelo
pensar muchas cosas la verdad… pero no sé…-
Cierra
los ojos pensando el psicólogo y tras un rato meditando dice. –Los sustitutos…-
-¿Perdón?-
Pregunta Javier algo confuso.
-Es
una película de Bruce Willis, trata de…-
Javier
le interrumpe diciendo. –La he visto Ángel, no tiene por qué contarla.- Ahora
que lo dice y que recuerdo la película, sí que me siento como uno de ellos.-
Se
produce un silencio. -¿Un sustituto?- Pregunta Ángel.
Afirma
con la cabeza el joven. –Es como si viviera en un sueño y no soy yo. O en otros
soy yo pero no es mi personalidad, sino la de otra persona.-
-Puedo
entenderlo…- Dice el psicólogo.
-No,
no lo entiendes, ser la otra persona igual o que te hagan ser la otra persona.
No todos somos iguales, así que no me entiendes.- Dice Javier con tono elevado.
Se
levanta Ángel diciendo. –Pues le recomiendo lo siguiente.- Se dirige hacia la
puerta y abriéndola dice. –Observa todo a tu alrededor, cambia poco a poco sin
cambios bruscos y ya verás que con el
tiempo mejorará. Intenta no hacer o que te hagan lo de la otra persona. Y lee
el último párrafo del libro “La vida es…”-
Javier
se levanta y sale de la habitación dejando a su psicólogo solo.